Zentrum Paul Klee_Berna_Suiza #Arquitectura



El Centro Paul Klee es un edificio tan expresionista que apenas parece un edificio. Cuando uno llega a Berna por la autopista, unas formas onduladas se le aparecen de pronto a un lado, alzándose majestuosas con sus destellos metálicos sobre un terreno que asciende en suave pendiente. Desde la ciudad, la percepción es menos imponente y la ondulación del edificio parece más integrada con el paisaje. Desde los prados posteriores, el edificio desaparece casi por completo. Tres suaves ondulaciones del terreno, que pasan de los tonos verdes de la hierba a los grises del acero, son lo único que anuncia la presencia de algo que no forma parte de la naturaleza. Bajo estas ondulaciones de la cubierta, se encuentran tres espacios protegidos, parecidos a unas cuevas, que se abren hacia las vistas de la ciudad y hacia la luz de sol.

El acceso se realiza tangencialmente a la fachada sur –transparente–, de manera que se acentúa la percepción de las ondas por el escorzo de la perspectiva, además de mostrársele al visitante algunas visiones del interior. El edificio, para ocultar aún más su presencia, está semienterrado. La entrada, pues, consiste en una pasarela curva que salva el foso excavado frente a la fachada sur para iluminar las plantas inferiores. Este acceso tan liviano es muy sugerente, tiene algo de esa magia que impregna el abordaje de un barco, cuando uno es consciente de estar abandonando el suelo firme para introducirse en otro medio menos seguro. Algo parecido siente uno aquí: como que está penetrando la oscuridad de la caverna y abandonando la luz clara de la superficie. Sin embargo, no es del todo así. Los tres grandes espacios generados por la ondulación de la cubierta están cerrados frontalmente por un plano translúcido. Entre este plano y la fachada paralela, se crean unos espacios intermedios donde se colocan diversos servicios –venta de entradas, tienda, cafetería…–, que se conectan mediante una suerte de paseo panorámico que atraviesa las ondas de la cubierta entrando y saliendo del edificio. La fachada sur vidriada está cortada por unos planos blancos horizontales que, además de dar mayor amplitud a los espacios intermedios, reflejan la luz del sol, y la introducen en las salas a través del plano translúcido de cerramiento.

Ya en los esbozos del arquitecto se aprecia el paralelismo de la forma ondulada de la cubierta-fachada con los trazos del pintor Paul Klee. Pero más allá de esta similitud tan directa y gráfica, se puede apreciar otra más sutil. Hemos hablado del gótico y del valor simbólico de la luz. Ahora toca hablar de las sombras, porque la analogía de este edificio con el mito de la caverna de Platón es algo que, sin duda, no pasará desapercibido a los filósofos que visiten el lugar, más incluso, cuando todos los elementos del mito están presentes: el fondo de la caverna, las sombras (obras de arte), el tabique o biombo que oculta la fuente de luz, los hombres, la realidad exterior y la luz del sol. En el mito de Platón, las sombras que veían los hombres encadenados en el fondo de la caverna eran la imagen de los objetos reales que se encontraban fuera de la caverna. Los hombres creían que lo que veían era real y no habrían creído a alguien que viniera del exterior y les dijera lo contrario. Su mundo se concentraba en esas sombras esenciales. Si hubieran salido, la luz del sol los habría cegado. Paradójicamente, en este caso, el movimiento se invierte. Los hombres vienen de la luz del sol, para sumergirse en la oscuridad de la caverna y contemplar las obras de arte bajo la luz suavizada por filtros y reflexiones; las obras de arte como sombras de la realidad de la que provenimos, pero que quizá seamos incapaces de descifrar sin un filtro que nos proteja de la cegadora luz del sol.

Zentrum Paul Klee
Tanz stellung 17.B, Paul Klee, 1935
Paul Klee Zentrum - Bern Zentrum Paul Klee
The Zentrum Paul Klee
Zentrum Paul Klee Yellow leaves.
Autumn in Bern.



Fotografías: Nicolás Nova, Norbert Aepli, Debora Pota, Denancé Michel, Kotivalo, Sailko, Kotomi, Roger Labeyrie, Chee Keong Foo, Jonathan Reid, LulaMae's, Annalisa Ricci.
Texto: Revista Diagonal (http://www.revistadiagonal.com/articles/nostalgia-del-absoluto/)